domingo, 8 de noviembre de 2009

Una palabra vale más que mil imágenes


Ayer conocí a Jesús, firme candidato a mi lista de amigos.
Y hablamos acerca de ese concepto que hace años mi gran maestro me enseñó. "Una palabra vale más que mil imágenes". Y es una verdad absoluta, la fuerza y la magia de las palabras, su poder de transformación y de motivación.

La palabra construye y destruye. El amor empieza en una mirada y termina en una palabra. Las guerras las inician las palabras.

Por eso es importante que hablemos bien de nosotros, de nuestras cosas y de nuestra gente. Porque un alto porcentaje de los que somos depende de nuestras palabras. De que palabras utilizamos, de cómo y cuándo las decimos. Por eso insisto tanto en que tus pensamientos y palabras sean límpios y buenos, de este modo tu vida también los será. Piensa bonito, vive bonito y vivirás bonito.

El cerebro es mucho más efectivo convirtiendo palabras en imagen o sentimiento que haciendo lo mismo con imágenes. Recuerdo uno de mis ejercicios favoritos que es el de : "Escuche mis palabras y trate de seguir mis instrucciones. A continuación intente no pensar en una manzana, no visualice mentalmente una manzana. Lo más normal es que tu cerebro no acuda a la orden, simplemente convierte en imagen la palabra manzana y luego (cuando es demasiado tarde) intentará resolver el entuerto, pero será imposible".

El cerebro no entiende de negaciones, su naturaleza es positiva. ¿Quieres manzana? ahí la tienes, pero no está preparado para el NO. Parece una buena idea contagiarse de esta costumbre del cerebro. Mencionas una meta y él, la visualiza. Después es cuando tú le fuerzas con palabras a pensar que tal cosa no está a tu alcance, no es para ti, no podrás lograrlo, etc...

Utiliza la palabra, utilizala en tu favor. Habla bien de ti y de todo lo que te rodea. ¡FUNCIONA!

Hay un negro que es presidente de los Estados Unidos ¿lo puedes creer? ¿Cómo lo hizo?
Contagiando al planeta con su YES WE CAN! La fuerza que generaba esa frase, el poder que otrogaba a los que la escuchaban y la coreaban es incuestionable. El Poder de las palabras

Sonríe, Abraza y Disfruta